La construcción de naves industriales en Alicante es muy variada. Lo cierto es que en esta provincia hay muchísimos polígonos que acogen todo tipo de empresas y, por tanto, las naves son muy diferentes en función del fin para el que vayan a ser utilizadas.
Las naves para oficinas y almacenaje son solo un ejemplo de este tipo de construcciones. Se trata de naves en las que parte del espacio está destinado a almacenar la mercancía que se vende mientras que en otra zona están las oficinas en las que se trabaja.
Muchas de estas empresas se dedican a la compra venta de productos que adquieren en a otros países y que luego venden en España. Pero, en los últimos años, también han aparecido negocios online que, debido a su gran crecimiento, precisan de una nave para desarrollar su trabajo.
Dos espacios con necesidades muy diferentes
Lo cierto es que el espacio destinado a las oficinas y el que está destinado al almacenamiento de la mercancía son muy diferentes. El espacio para mercancía no va a tener los mismos requerimientos que una oficina en lo que se refiere a aislamiento y temperatura.
Por eso, una de las maneras más cómodas de realizar la división es creando una nave adecuada para el trabajo logístico con la mercancía y, en el interior de la misma, un altillo en el que estarán las oficinas siendo una especie de recinto diferenciado en el interior de la nave al que solo puede acceder el personal autorizado.
Oficinas acondicionadas
Existen diferentes materiales para poder crear este espacio de oficinas pero es fundamental que cumpla dos criterios: que tenga un buen aislamiento acústico y un buen aislamiento térmico. Por supuesto, es necesario un buen sistema de aire acondicionado con renovación de aire para garantizar el mejor ambiente.
Para lograr el mejor aislamiento se suele utilizar un sistema de doble pared con planchas en medio o con espuma que impida que el ruido de las maquinas que están trabajando fuera pueda molestar en los despachos y que además, también evita que se salga el calor.
Siempre que sea posible es bueno que las oficinas cuenten con ventanas al exterior de la nave, por lo que deben de estar pegadas a una de sus paredes. Esto facilita que entre una buena dosis de luz natural, algo que mejora mucho las condiciones laborales de la gente.